lunes, 20 de febrero de 2012

El embarazo de la mentira


Mi frase del día:

“La honestidad no es la virtud mas remunerada pero si es la que mas dolores de cabeza te evita”

Un amigo me contó un caso que quisiera mencionarles. Él tenia una novia, ella lo engañó con su antiguo novio, rompieron  y  no la volvió a ver hasta después de mucho tiempo.
Como muchas  veces pasa con  los ex novios al volverse a ver, mi amigo, sintió de nuevo una atracción por la niña que le quitaba los suspiros hace algunos años. Se siguieron frecuentando y, en el cine, ella le plantó el beso apasionado.

Mi ilusionado amigo pensó que podía perdonarle lo que le hizo la vez pasada, que todo iba a ser como se lo había imaginado cuando estaba con ella y que todo terminaría como en un cuento cursi. Pero, me platicó, que lo que le incomodó después fue que ella lo besaba con una desesperación que llegaba al punto de ser incomoda y las conversaciones rondaban mucho en, hipotéticamente hablando, ¿Qué pasaría si estuvieran casados?

Pasaron las semanas y conforme surgían las citas, estas características se habían marcado cada vez más, hasta que un día, el despistado hombre, notó que el estomago de su amada tenía una forma muy particular. Durante el tiempo que él la conoció ella nunca había sido esbelta pero en estos momentos su estomago tenía una curvatura que era la de una mujer embarazada.

Recordando las mentiras que le había dicho cuando se separaron, el confundido hombre, le preguntó: -¡¿estás embarazada?!- a lo que ella enojada le dijo varias acusaciones e insultos y se fue. Cinco meses después ella concibió a una niña.

El hecho de que ella nunca le haya dicho de su embarazo, y las desaforadas muestras de amor, hizo pensar a mi amigo que ella quería tener relaciones para después engañarlo diciendo que ese bebé era suyo.

La mentira es un vicio que muchas veces parece ser la salvación a todos nuestros problemas, pero en si solo hace que la gente crea cada vez menos en nosotros. Al final, siempre saldrá a la luz lo que hayamos ocultado y quedaras muy mal parado ante las personas. 

La honestidad es un valor que se a perdido, pero en este caso, si ella hubiera hablado las cosas mi amigo no hubiera dudado en encargarse de las dos y ella no estaría maldiciendo a medio mundo por su situación como lo hace ahora… Muy lamentable este caso.

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